El Palatino siempre fue para los romanos el lugar sagrado donde la ciudad había nacido.
Especialmente
en los últimos siglos de la Républica, se edificaron allí numerosas habitaciones privadas y villas urbanas de ricos e ilustres personajes.
en los últimos siglos de la Républica, se edificaron allí numerosas habitaciones privadas y villas urbanas de ricos e ilustres personajes. Finalmente Augusto, en el año 44 a .C, hizo levantar un templo dedicado a Apolo y se trasladó allí. Desde entonces casi todos los emperadores se fueron a vivir al Palatino que poco a poco se transformó en una inmensa y suntuosa morada real .
Se erigieron con el tiempo santuosos palacios como la Domus Augustana,Domus Flavia, la Domus Transitoria, la Domus Áurea, y la Domus Tiberiana.
2 comentarios:
Gracias, Raquel, por el esfuerzo de publicar esta entrada en el blog. A pesar de los obstáculos, el resultado merece la pena.
Siempre hay un lugar en la ciudad que representa una nación o un imperio, un lugar que parezca reservado a los edificios que ostentan el poder social y político. Ese lugar mágico nos ayuda a representar en nuestra mente y en nuestra alma el espíritu de la ciudad y de sus moradores.
Me llama la atención la piedad de los gobernantes de Roma. La morada real amparada por los dioses... una concepción tan ligada a la Historia.
Preciosa entrada.
Muchos saludos.
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